Por medio de la consulta y a través de sesiones individuales, el usuario y el psicólogo determinarán los pasos a seguir en cada una de las sesiones. El usuario es un agente activo de todo cambio ya que tendrá el compromiso de “el trabajo entre-sesiones”, siendo el psicólogo un agente que facilita el cambio.
El proceso empieza con la evaluación y diagnóstico que sirven para establecer cuáles son los objetivos de la terapia o proceso más adecuado entre el usuario y el psicólogo con el fin de mejorar el estado de bienestar mental, físico y social.
La psicoterapia Integra todas aquellas técnicas y enfoques necesarios para cada usuario en particular, adecuándo a cada uno de ellos las técnicas y enfoques más efectivos para llegar a alcanzar los objetivos que nos planteamos.
Primer contacto o primera consulta , donde el usuario plantea su situación-problema al psicólogo para determinar si:
Esta fase puede extenderse de una a tres sesiones en función de las áreas a evaluar (individual, contexto familiar, escolar…) y los cuestionarios o escalas a utilizar.
Cada sesión tiene una duración de 50 minutos o una hora, semanal.
Una vez finalizada la evaluación de la situación o problema se intenta explicar al usuario por medio de un modelo explicativo cuales son:
El objetivo del tratamiento es enseñar y facilitar diferentes estrategias o técnicas para saber afrontar las situaciones que generan un malestar significativo, así como potenciar los recursos propios del usuario por medio del trabajo en cada sesión de tratamiento y el trabajo fuera de las sesiones ( entre sesiones: en tu “casa, trabajo, colegio…” vida diaria).
Exigimos para que haya unos resultados satisfactorios un trabajo activo y continuo por parte el usuario y sus colaboradores. (familia, compañeros, amigos, profesores…)
Una vez se alcanzan los objetivos planteados en la fase diagnóstica, por medio de sesiones mensuales intentamos mantener lo aprendido y generalizarlo en el tiempo para que el usuario sea autónomo en la gestión y enfrentamiento de su vida diaria